Tip #1: Encuentra tu ubicación ideal. Cada ciudad es diferente y tiene su propio movimiento. Ubica las zonas estratégicas en donde las personas requerirán tus servicios y que, además, les sean de fácil acceso.
Tip #2: Adecúa tu espacio. Piensa en tu cabina como el lugar donde tus clientes se tomarán un tiempo para ellos mismos, para cuidarse, descansar, relajarse y olvidarse un ratito del ajetreo de “acá afuera”. Así que esmérate por brindarles un espacio de armonía, calma y tranquilidad que relaje sus sentidos.
Tip #3: Adquiere insumos de calidad. Poner cuidado en este punto es vital, pues la mayoría de estos insumos entrarán en contacto, de una forma u otra, con la piel de tus clientes.
Tip #4: Rodéate de personal calificado. Los servicios que ofreces son especializados y tienen que ver con el bienestar y el cuidado. En esa medida, tu personal deberá contar con todas las calificaciones necesarias para llevar a cabo su trabajo de manera óptima y profesional.
Tip #5: Trabaja con equipos profesionales. Asegúrate de que los equipos que adquieras sean profesionales, de alta calidad, que cumplan las medidas sanitarias y de seguridad que garanticen su buen funcionamiento y resultados, además de que cuenten con el respaldo de una empresa líder. No pongas en juego tu prestigio ni sacrifiques calidad por precio.
Bonus tip: Revisa y cubre los aspectos legales. Todo negocio necesita tener su documentación en regla para operar legalmente, ¡sin excepción! Asesórate debidamente para cubrir todos los requisitos legales y sanitarios para el buen funcionamiento de tu cabina y tus equipos.