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Cirugía Estética y Cosmiatría: Dos Mundos Interconectados

Lic. Ana Yessica Villa Aguiar

Directora Técnica de Tendencia Spa

Cada día crece el número de mujeres y hombres que buscan un cambio estético por medio de una cirugía. Constantemente recibo mensajes de profesionales de la estética solicitando una guía para tratar a sus clientes poscirugía o para exponerme algún caso posquirúrgico complicado; también me escriben personas que se han sometido a alguna cirugía estética y que no obtuvieron los resultados esperados o para preguntarme si el tratamiento posquirúrgico que les están aplicando es el correcto.

Para muchas y muchos profesionales de la estética no es tema de interés entrar en la praxis de este tipo de tratamientos; sin embargo, existe otro gran número que sí lo hace o que le interesa, pero comúnmente no se tiene claro qué conocimientos se deben tener para hacerse cargo y tomar responsabilidad de este tipo de procedimientos.

Si a ti te interesa ser una o un profesional del abordaje de tratamientos pre-, peri- y posquirúrgicos, te comparto las áreas de conocimiento en las que, según mi experiencia, es indispensable formarte para evitar complicaciones y tener resultados exitosos, para ti y para el cliente.

Es necesario conocer la anatomía y fisiología humana, sobre todo en los siguientes sistemas: tegumentario, linfático, arterial y venoso, y miofascial, ya que de ellos depende la preparación de un cuerpo para una cirugía, la regeneración del tejido, la recuperación del libre movimiento, la buena cicatrización y la prevención de fibrosis; ahora que, para estimularlos y equilibrarlos, sería maravilloso dominar el linfodrenaje, el masaje de tejido profundo, el masaje hemolinfático y la técnica de inducción fascial, lo anterior, en lo que a terapias manuales se refiere. Y, la «cereza del pastel» sería la terapia kinesiotaping que, en la actualidad, se aplica como técnica periquirúrgica, es decir, en las horas cercanas a la cirugía e incluso al terminarla, con muy buenos resultados.

Otro aspecto a sumar es el conocimiento en cosmética regenerativa: dominar todos aquellos procedimientos cosmetológicos o cosmiátricos, que inducen a las células de la piel a iniciar procesos de autorregeneración, por medio de química cosmética y aparatología estética.

La química cosmética está evolucionando a pasos agigantados; cada vez más, surgen principios activos nuevos y tecnología avanzada que los hace llegar a niveles más profundos de la piel y a las células o tejidos específicos —según el objetivo que se persiga—, por lo que debemos estar en constante investigación para tomar estas opciones dirigidas a regenerar células y tejidos.

En cuanto a la aparatología estética aplicada al campo de la preparación y recuperación quirúrgica, es de suma importancia tener un amplio conocimiento sobre las corrientes electroestéticas, para determinar cuáles de ellas son las adecuadas en el tratamiento prequirúrgico, cuáles en el periquirúrgico y cuáles en el posquirúrgico, así como la dosimetría a aplicar: ¿cada cuándo es posible aplicarlas?, ¿cuánto tiempo?, ¿cómo puedo combinarlas?, ¿cuál es el número mínimo y máximo de sesiones a aplicar? También hay que tener siempre claros los objetivos a perseguir en estas tres fases: pre-, peri- y pos-.

Continuamos con el conocimiento que nos conecta directamente con la cirugía estética; para poder tratar a un cliente que se someterá a un procedimiento quirúrgico estético, debo tener un amplio conocimiento sobre cada una de las cirugías estéticas que se practican —y es que cada vez son más especializadas—, las zonas corporales donde se realizan, en qué consisten, el tiempo de duración que tienen en quirófano, los riesgos que representan, si son procedimientos ambulatorios o requieren de hospitalización, y cuántos días, cuáles son los posibles riesgos que corre el paciente, los cuidados pre- y posoperatorios. También será necesario tomar una formación o curso en primeros auxilios, para poder manejar situaciones de emergencia.

La demanda de las y los profesionales de la estética, capacitadas y capacitados en esta área, cada vez será mayor; debemos prepararnos cada día más para estar al nivel de este crecimiento. Otra pregunta que se me plantea, es: ¿El tratamiento posquirúrgico lo trata el fisioterapeuta o la cosmiatra?, a lo que respondo: Dentro de la fisioterapia existe un campo que se llama dermatofuncional, en el que siempre será necesario el tratamiento desde la perspectiva estética y no únicamente funcional. En conclusión, la combinación de ambos profesionales dará excelentes resultados, más si las y los cosmiatras se forman concienzudamente en todas las áreas anteriormente mencionadas; con ello, se contará con todas las herramientas para llevar, de manera autónoma y con éxito, cualquier tratamiento pre-, peri- y posquirúrgico.