Existen muchos factores que han influido para que en la actualidad los hombres quieran tener un mayor cuidado de su persona en general; y es que antes, el cuidado de la piel en particular, era un tema prácticamente del género femenino. Factores que pueden ir desde obtener un buen empleo, incrementar la autoestima, el bombardeo de los medios y redes sociales mostrando cuerpos fitness, y así disminuir el riesgo de enfermedades a través del ejercicio y una buena alimentación, hasta las ganas de encontrar una pareja.
El cuidado de la piel masculina implica conocer y distinguir su estructura, y las características que lo diferencian de la piel femenina, pudiendo así, por lo tanto, darle un tratamiento adecuado. La condicionante principal que marca la mayoría de estas diferencias en la piel de los hombres es la hormona testosterona, que en la pubertad aumenta su actividad afectando a las glándulas sebáceas y sudoríparas, lo que provoca mayor secreción de sebo, sudor y estímulos al crecimiento de pelo en el hombre más que en la mujer. Así mismo, la piel de un hombre es más gruesa que la de la mujer de un 20 a 25%.Tiene más número de glándulas sebáceas por lo que tiene más poros y más grandes. La hiperactividad androgénica le genera mayor secreción de sebo, por lo que en su mayoría es propenso a tener acné en la pubertad. Al ser más gruesa que la piel femenina, se vuelve más resistente de un 15 a 25%, y menos sensible. Sintetiza más colágeno y elastina, a diferencia de la mujer; su piel también se adelgaza gradualmente con la edad, pero es más compacta y turgente.
La piel del hombre tarda más envejecer que la piel de la mujer, pero sus arrugas se vuelven más profundas.
El mayor distintivo en la piel del hombre es el crecimiento de pelo en zonas como la barba y el bigote, que aparecen a los 15 años para después crecer más pelo en el pecho, los brazos y piernas.
Las Alteraciones de la piel masculina
Están relacionadas principalmente con el folículo pilosebáceo, como la foliculitis, sicosis de la barba —donde hay infección del folículo piloso—, la queratosis, engrosamiento de la capa córnea, alopecia, y el aumento en la secreción de sebo; en algunos casos solo presenta una zona T con más brillo e impurezas; y, por último, sensibilidad y deshidratación, en zonas como el cuello y las mejillas, debido al afeitado,
Existe gran variedad de productos destinados al cuidado de la piel del hombre, lo principal es incluir en su rutina un limpiador facial de textura ligera y, preferentemente, a base de agua.
También es importante el uso de exfoliantes en gel, que ayuden a la remoción de células muertas y permitan destaponar o prevenir vellos enterrados —que puedan generar infección o inflamación—, y que favorezcan la receptividad de los productos que sean aplicados posteriormente.
Cuando realice el afeitado es recomendable el uso de productos calmantes, desensibilizantes, astringentes y bactericidas, que ayuden a cerrar los poros dilatados y desinfecten la piel.
Los productos aftershave funcionan para cicatrizar y restablecer el pH de la piel, desinfectan y ayudan a calmar las irritaciones causadas por la navaja de afeitar.
Después de afeitar, se recomienda hidratar la piel según su tipo, esto ayudara a prevenir y controlar incluso la grasa que pueda generar la piel así como a combatir signos de envejecimiento.
Por último, es indispensable el uso de protector solar.