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Fitocosmética: El origen de nuestra profesión (segunda parte)

E.C.C. Minerva Dávila Santos

Directora de Lumine

En este artículo hablaré de la composición química de los fitocosméticos y mencionaré algunos ejemplos de plantas y su contenido de fitoactivos, así como de sus acciones específicas.

Existen sustancias activas en cantidades variables, en muchas plantas medicinales; por lo general, están casi siempre en mezclas de componentes de estructura semejante que actuarán del mismo modo; para su estudio, se dividen de la siguiente manera:

FLAVONOIDES

Son pigmentos naturales presentes en los vegetales; son antirradicales; refuerzan los vasos sanguíneos; de efecto antiinflamatorio; estimulan una mayor actividad de la vitamina C; mejoran la elasticidad del tejido. Los podemos encontrar en casi todas las verduras de hoja, té verde y té negro, en la soya y el vino; también los contienen el extracto de manzanilla, la caléndula, el ginkgo biloba, etc.

Principales acciones: son venotrópicos; auxilian contra los trastornos circulatorios; son antibacterianos, estimulan el crecimiento del cabello y regulan la síntesis de colágeno y elastina.

CUMARINAS

Son compuestos de estructura más compleja, con propiedades venotónicas y anticoagulantes; son protectoras vasculares, por lo que se utilizan mucho en trastornos linfáticos y en casos de fragilidad capilar. Ejemplo: La manzanilla.

ALCALOIDES

Estas son sustancias que forman sales al mezclarse con ácidos; son de origen vegetal. Las plantas que los contienen se incluyen casi siempre entre las plantas tóxicas; su uso se limita más a lo medicinal que a lo comestible; la mayoría tiene un gusto amargo y se derivan de los aminoácidos; se utilizan para calmar el dolor. Ejemplo: la belladona, que contiene atropina; y la dormidera, que contiene morfina y codeína, utilizadas como expectorantes.

PRINCIPIOS AMARGOS

Su acción se debe, precisamente, a su sabor amargo; ejemplo de ello son la genciana y el lúpulo —que da su característico sabor amargo a la cerveza—. Si la planta tiene, además de principios amargos, cantidades apreciables de aceite esencial, estaremos hablando de principios amargos aromáticos. Estas plantas fortalecen el tracto digestivo y pueden actuar como tónicos generales en personas con anorexia o mal funcionamiento estomacal.

Existen plantas culinarias que, además de los aceites esenciales, contienen sustancias de sabor intenso, como el jengibre, el chile, la pimienta, pero que, sin embargo, estimulan la circulación.

TANINOS

Son compuestos vegetales astringentes que se pueden combinar con las proteínas de la piel y las mucosas, aumentando su resistencia y provocando su coagulación. En cosmética, son utilizados en lociones para piel grasa y champús antiseborreicos y para cabello graso. De las plantas más utilizadas en cosmética por su alto contenido en taninos están: la pingüica, la corteza del encino y del roble, el granado, hamamelis, entre otras.

SAPONINAS

Tienen un efecto astringente y dermopurificante; son limpiadoras naturales por su semejanza con el jabón; son expectorantes y, junto con los flavonoides, tienen un efecto diurético.

Entre las plantas que tienen mayor contenido de saponinas se encuentra, el castaño de Indias, la saponaria, el regaliz, la hiedra, el rusco, etc.

GLUCÓSIDOS

Son sustancias conocidas por su acción antioxidante y cardiotónica, pues aumentan la resistencia de los capilares. Ejemplo de planta: la dedalera o digital.

ACEITES ESENCIALES

Son los productos más elaborados del reino vegetal. Son sustancias que contienen compuestos volátiles del metabolismo de las plantas, pero que guardan el aroma; se obtienen a través de la destilación por arrastre de vapor; son bastante ligeros y de textura muy fina; su composición química es muy rica y variada, además de compleja; entre sus propiedades destacan el de ser potentes antisépticos, bactericidas y analgésicos. Son la energía vital de la planta.

A través de la inhalación, el aceite llega al cerebro, actuando a nivel del sistema nervioso central. De manera tópica, los aceites esenciales presentan efectos fisiológicos tanto como psicológicos de notable respuesta.

A continuación, daré ejemplos de algunas plantas y su contenido de fitoactivos:

Caléndula: fitohormonas, mucílagos, carotenoides y saponinas.

Melisa o toronjil: aceites esenciales.

Nogal: taninos.

Menta piperita: mentol, mentenos, taninos, aceites esenciales.

En cuanto a las acciones de los fitoactivos, podríamos resumirlas con base en sus características funcionales:

  1. Astringentes. Reducen temporalmente el tamaño de los poros y disminuyen la sensación de grasa en la piel.
  2. Lenitivos o calmantes. Alivian la inflamación de la piel.
  3. Dermopurificantes. Son la versión cosmética de la acción farmacológica antiséptica.
  4. Tonificantes y estimulantes. Son, de igual forma, la versión cosmética de la acción farmacológica rubefaciente, es decir, del incremento de sangre en los capilares.
  5. Refrescantes. Función típica de los aceites esenciales de las plantas, como la menta, la naranja…